Ante la omisión de las autoridades de los diferentes órdenes de gobierno para dar solución al problema de contaminación del Río Duero, los productores agrícolas piden se considere el tema en la agenda pública, ya que durante los últimos años las exigencias internacionales para la exportación de fresas se han vuelto más recurrentes y de no cumplir con ellas temen que se cierren los mercados, lo que impactará de forma negativa a la economía de la región.
Aunado a esto, también señalaron que la falta de apoyos gubernamentales, la aparición de plagas y el cambio climático han afectado directamente a la producción de fresas, disminuyendo hasta en un 30 % durante los últimos tres años.