El ritmo de vida en la actualidad ha provocado que tanto el hombre como la mujer salgan a trabajar, incluso teniendo dos empleos para poder cubrir los gastos que se tienen, esto ha impactado en la manera que comemos, ya que no se dispone del mismo tiempo para cocinar lo que conlleva a comprar más alimentos procesados.
El investigador de la UAER, Alfredo Cesín Vargas "Hay cambios de dieta y cambios de dieta que tienen que ver inclusive con que la mujer tiene que salir trabajar y ya no dedicar tanto tiempo a guisar y se van perdiendo esos alimentos"
Los cambios en las dietas están asociados a los cambios en nuestras prácticas, anteriormente en la Región Ciénega era común ir a los cerros cercanos a conseguir alimento como nopal, quiote, maguey e incluso leña, esto ha hecho que recetas y platillos característicos de la zona se vayan perdiendo.
La cocinera tradicional de Sahuayo, Esperanza Valdovinos Sánchez: "Lo difícil es que ya ahorita la juventud no conoce mucho nuestros platillos osea no los consumen por que ellos optan más por la comida rápida."
Son pocos los espacios en los cuales se despierte el interés de las nuevas generaciones para aprender y conocer más de la comida que caracterizaba a su región todo esto con la intención de preservar ese conocimiento.