Un jurado en la corte de Hennepin, en Estados Unidos declaró culpable a la expolicía Kim Potter de Brooklyn Center, Minnesota, de dos cargos de homicidio involuntario y accidental en el tiroteo de Daunte Wright.
Kim enfrenta cargos de homicidio involuntario con agravantes y homicidio accidental por dispararle y provocarle la muerte al afroamericano Daunte Wright el 11 de abril de 2021. En las imágenes del incidente, se puede escuchar a Potter gritando "Taser" ("pistola eléctrica") repetidamente antes de dispararle a Wright.
Potter, de 49 años, subió al estrado y testificó ante el jurado, se puso a llorar mientras relataba el tiroteo, y finalmente se disculpó e insistió en que "no quería lastimar a nadie".
Potter fue acusada inicialmente de homicidio intencional sin premeditación en abril. Los fiscales agregaron un cargo de homicidio involuntario con agravantes a principios de septiembre. Potter se ha declarado inocente de todos los cargos.
Aunque la pena máxima por homicidio involuntario con agravantes es de 15 años de prisión, debido a que Potter no tiene antecedentes penales, las pautas de sentencia de Minnesota recomendaron una sentencia de aproximadamente entre 6 y 8,5 años de prisión. Para el cargo de homicidio intencional sin premeditación, las pautas recomiendan entre 3,5 y casi 5 años de prisión.
En octubre, los fiscales informaron a la corte que tenían la intención de buscar una pena más severa de lo que exigen las pautas estatales cuando Potter fuera sentenciada. Esto bajo el argumento de que ella abusó de su posición de autoridad y que su conducta causó "un peligro mayor de lo normal para la seguridad de otras personas".
Si la jueza Regina Chu está de acuerdo en que hubo factores agravantes, Potter podría recibir una sentencia de prisión más prolongada que las recomendaciones establecidas, pero no más que el máximo legal.
Potter tendrá que cumplir dos tercios de su sentencia en prisión. Con buen comportamiento, será elegible para la liberación supervisada por el otro tercio.
La muerte de Wright provocó días de disturbios en la ciudad de Brooklyn Center después de un verano de protestas de costa a costa sobre cómo la policía trata a las personas de color.
