El precio de los combustibles provoca el incremento en los costos de la canasta básica, la escasez de algunos productos perecederos por el cambio climático también ha propiciado que se disparen.
Esta situación trae consecuencias negativas para los comerciantes, empresarios y consumidores que han tenido dificultades económicas para la adquisición de productos, bienes y servicios.
La inflación en México sigue en aumento, en la primera quincena del mes de julio de 2022, se ubicó en 8.16 por ciento anual, aumentó 0.43% más que el mismo período de 2021.
Los productos que permanecen en el listado de los "más caros" desde junio pasado son la papa y la naranja.
Empresarios han tenido repercusiones económicas debido al incremento de los combustibles.
Las entidades que reportaron durante los primeros 15 días de julio las precios más caros en alimentos fueron: Michoacán (0.69), Guanajuato (0.67%), Chiapas (0.66), Sinaloa (0.64%) y Coahuila (0.59%).