La tala de árboles como casuarinas y eucaliptos en el Parque Nacional Lago de Camécuaro ha generado controversia por el daño ambiental y social, los directivos del espacio natural justificaron que se realiza una sustitución de las especies invasoras, ya que han provocado el deterioro progresivo de la flora y fauna, especialistas en agroecología señalan que la deforestación debe ser selectiva y gradual, con el asesoramiento de biólogos e ingenieros forestales.
La sustitución debe ser gradual con la plantación de árboles nuevos esto permite tener un ordenamiento ecológico y menor impacto ambiental, ya que una vez que se detectan especies enfermas es necesario reemplazarlas. Comentó el investigador del Colegio de postgraduados México, José Luis Pimentel.