Durante el 2022 la inflación ha generado una crisis económica en diferentes sectores, ha sido difícil distribuir los ingresos, planear una compra, pagar deudas o invertir en algo rentable, ya que los precios, que eran una referencia para asignar nuestro dinero de la mejor manera posible, están distorsionados.
Por ello, los expertos recomiendan prepararnos para el cierre de año y una posible recesión económica para el 2023, donde se puede dar una disminución en la actividad comercial e industrial, lo que tendría un impacto directo en la generación de empleos, por ende, se alteraría significativamente el consumo de los hogares, el pago de deudas y será más complicado ahorrar.
La pandemia por covid-19 provocó repercusiones económicas para diversos sectores de manera especial para los pequeños y medianos comercios, muchos de ellos tuvieron que cerrar sus negocios de forma temporal o reducir las plantillas laborales, actualmente incentivan el consumo local.
Las familias mexicanas vivirán la recesión con la afectación directa a sus bolsillos y la pérdida de poder adquisitivo.