La inseguridad es un mal que no solo marca a las familias, la sociedad, el comercio, entre otros sectores también se ha hecho presente en los comicios electorales.
Durante la contienda del proceso electoral 2017-2018 en Guerrero se registraron asesinatos que marcaron las elecciones donde se eligieron a presidentes municipales, diputados locales, diputados federales, senadores y al presidente de la Republica.
El informe sobre violencia política 2018, elaborado por Etellekt Consultores, arrojó que entre el 8 de septiembre de 2017 y el 6 de febrero de 2018, se registraron un total de 83 agresiones en contra de políticos en todo el país, de las cuales 54 terminaron con el asesinato de actores políticos, principalmente alcaldes en funciones, exalcaldes, regidores y precandidatos en el ámbito local. Y la mayoría de estos crímenes se perpetraron en Guerrero. Según la consultora la violencia recrudeció cuando oficialmente inició en el proceso de precampañas en diciembre de 2017.
Para el mes de junio de 2018, esta misma consultora registro 112 asesinatos, de los cuales 23 fueron en Guerrero.
El 18 de enero fue asesinado Gabriel Hernández Alfaro, dirigente del Partido Encuentro Social en Petatlán.
El 21 de febrero Antonia Jaimes Moctezuma, precandidata a la diputación local por el PRD en Chilapa fue ultimada.
25 de febrero asesinaron a Dulce Nayeli Rebaja candidata del PRI a la diputación por Chilapa, junto con ella falleció su tío Francisco Rebaja y María del Refugio Bello García también tía de la candidata.
En mayo fue encontrado en un asiento de su camioneta Abel Montufar Mendoza con visibles huellas de tortura y disparos, era presidente municipal con licencia de Coyuca de Catalán y contendiente de la coalición PRI- Partido Verde candidato a la diputación local.
En el 2018 los precandidatos fueron alcanzados por la violencia, en Zihuatanejo el contendiente por la alcaldía de Zihuatanejo del PRD, Homero Espino Bravo fue asesinado en el mes de marzo.
En 2017 hubo 17 homicidios, también perdió la vida en un atentado el presidente del municipio de Petatlán, Arturo Gómez Pérez quién de acuerdo a sus cercanos se supo buscaba la reelección por el municipio. También fue asesinado el aspirante a la alcaldía de Atoyac por el PRI, Adolfo Serna Nogeda ambos el 28 y 31 de diciembre respectivamente.
El cuerpo de Miguel Solorio Figueroa, ex regidor y precandidato independiente a la alcaldía de Zihuatanejo también fue encontrado sin vida junto con su escolta en el mes de noviembre.
Este proceso electoral fue el más violento en la historia de Guerrero con 24 políticos asesinados y desaparecidos.
Incluso el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC) de Guerrero, a través de su titular Nazarín Vargas Armenta reveló que se registraron hasta 17 renuncias de candidatos propietarios y suplentes a diputados locales y tenía 90 solicitudes de sustitución para los ayuntamientos.
Los partidos políticos desde sus representaciones en el estado del Movimiento Ciudadano, PRD, PRI, PAN entre otros lanzaron pronunciamientos tras pronunciamientos en la exigencia de esclarecer los asesinatos de los candidatos, incluso desde el Congreso Local se hicieron pronunciamientos y la Fiscalía solo se quedó en investigaciones estériles en la mayoría de los casos.
En este nuevo proceso electoral que recién comenzó, en entrevista y cuestionada al respecto el Gobernador de Guerrero Héctor Astudillo Flores, aseguró que su gobierno brindará seguridad a los candidatos durante el proceso electoral del 2021 en la medida de las posibilidades.
Y el IEPC solo ha dado a conocer que será más cuidados con el proceso en esta pandemia por el Covid-19 .