La comunidad pesquera asentada en la Laguna de las Salinas expresó su preocupación debido a que, a casi un mes de que la draga de la Marina fuera retirada para realizar trabajos en Acapulco, no han recibido información sobre su regreso.
Desde el pasado 16 de octubre, cuando la draga fue retirada, los pescadores han enfrentado dificultades, y anticipan que en diciembre, cuando las mareas bajan, sus embarcaciones quedarán varadas en el lodo acumulado en el fondo de la laguna.
Este fenómeno no solo genera daños en los motores y hélices de las lanchas, sino que también afecta la actividad pesquera y sus ingresos; por eso urgen al gobierno estatal y a la Marina que agilicen el regreso de este equipo.
Los ribereños denunciaron que, durante los cuatro meses que la draga trabajó en la laguna, los avances fueron mínimos, ya que la maquinaria constantemente presentaba fallas y se utilizaba en zonas menos prioritarias para la pesca. Según sus estimaciones, los trabajos no alcanzaron ni el 30 por ciento del desasolve necesario en el cuerpo lagunar.