Conductores de automóviles y motocicletas alertaron a las autoridades el riesgo que existe de deslave sobre la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo, en el punto conocido como El Calvario.
Y es que hay dos cerros en esta zona que poco a poco se han ido deslavando, incluso el año pasado derivado de las lluvias un laúd colapsó y obstruyó ambos carriles de este tramo de la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo.
El conductor de manera anónima dijo que ya existe un antecedente y debió servir de experiencia, pero lamentó que las autoridades no han hecho nada por resolverlo.
Lo ideal es que se coloquen cortinas de malla ciclónica reforzadas que contengan la caída de material pétreo, como en muchas autopistas del país, lo que forzosamente requiere inversión federal.
La temporada de lluvias y ciclones ha comenzado y la Secretaría de Comunicaciones y Transporte durante todo el año no hizo nada por atender el problema, por lo que no se espera que lo hagan en estos momentos.