El campesino Heriberto Mundo Sánchez, declaró que se está tornando difícil el trabajo de campo en Vallecitos de Zaragoza para mantener el cuidado de las milpas y la siembra porque los caminos ya se destruyeron.
Aunque reconoció que previo a la temporada de lluvias, los caminos fueron rastreados, en cuanto cae un poco de agua, estos se destruyen porque son de terracería y por estos corre el agua con fuerza.
Declaró que actualmente ya están aplicando la segunda ronda de abono, pero sí es difícil para los campesinos que no pueden ingresar con sus vehículos, dijo que algunos entran con las bestias mulares y otros caminando y cargando los bultos del químico.
Manifestó que esperan que, para noviembre, temporada de cosechar, puedan tener a tiempo el rastreo de caminos para poder sacar el producto.