Las altas temperaturas propiciadas por la canícula han provocado un aumento de más del 80 por ciento en la venta de cocos y agua natural embotellada en zona de playas. Muchos turistas buscan estos líquidos para hidratarse y refrescarse por el calor.
Comerciantes indicaron que en un día normal se venden entre 30 y 50 cocos y botellas de agua, ahora están ofertando hasta 70 o 100 unidades. Esto sin duda ha sido benéfico para sus ingresos económicos.
En el caso del coco, la vendedora Antonia Jiménez Fierro, dijo que es la fruta favorita para refrescarse, pues es rica en electrolitos que ayudan a elevar las plaquetas y evitar golpes de calor.
Los turistas además buscan las aguas frescas, paletas heladas y raspados, como estrategia para quitarse la sed y refrescarse, aunque es una solución momentánea por las grandes cantidades de azúcar.