La renuencia de algunos habitantes de Zihuatanejo de continuar arrojando desechos sólidos a las calles continúa sin que la dirección de Servicios Públicos aplique sus sanciones económicas que en el pasado anunció con entusiasmo.
Ante la falta de mano dura con la sociedad, a cientos de ciudadanos se les hace arrojar la basura a la calle o bien sacarla en horarios no adecuados, acción que propicia a que los perros callejeros rompan las bolsas y los desechos terminen sobre la vialidad.
Sin embargo, este martes, se pudo observar la inconsciencia de algunas personas de Zihuatanejo, en las alcantarillas pluviales del centro de la ciudad, pues el agua pluvial arrastró decenas de basura toponeando estas rejillas.
Aunque el personal de Servicios Públicos las limpió de manera oportuna, el mensaje es para la gente que continúa arrojando los desechos a la calle, a que deje de hacerlo y piense en las afectaciones, como en este caso, inundaciones por las alcantarillas pluviales tapadas.
Que al final del día, toda la basura que un ciudadano tira a la calle, termina en la bahía de Zihuatanejo.