En noviembre de 2024, la confianza empresarial en México se situó en 51.5 puntos, una disminución de 4.6 puntos respecto al mismo mes del año pasado, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Este resultado marca el segundo nivel más bajo del año, solo por detrás de septiembre, cuando alcanzó 50.9 puntos.
El Indicador Global de Opinión Empresarial de Confianza (IGOEC), que combina los sectores manufacturero, construcción, comercio y servicios privados no financieros, acumula siete meses consecutivos a la baja. Este comportamiento refleja una percepción menos favorable de los empresarios sobre la situación económica actual y futura del país.
El sector de servicios privados no financieros presentó la mayor caída interanual, registrando 51.7 puntos, lo que representa un descenso de 6.2 puntos frente a noviembre de 2023. Le siguió el sector comercio, con 51.8 puntos, una disminución de 4.5 puntos. Por su parte, el sector de la construcción retrocedió 2.6 puntos, quedando en 49.2 puntos, mientras que las industrias manufactureras cayeron 2.1 puntos, alcanzando 51.6 puntos.
Sobre si es un buen momento para invertir, los empresarios mantienen una percepción negativa. En servicios privados no financieros, este indicador cayó 20 puntos, mientras que en comercio retrocedió 11.5 puntos. La construcción y las industrias manufactureras también mostraron caídas de 5.9 y 2.2 puntos, respectivamente.
En la comparación mensual, noviembre trajo ligeros cambios respecto a octubre. El Índice de Confianza Empresarial (ICE) mostró retrocesos en tres de los cuatro sectores. El ICE de industrias manufactureras cayó 0.1 puntos, mientras que los sectores de comercio y servicios privados no financieros registraron descensos de 0.5 y 0.6 puntos, respectivamente. Solo el sector construcción tuvo un aumento marginal de 0.2 puntos.
Los indicadores de confianza empresarial, como el ICE y el IGOEC, son clave para medir el sentimiento de los directivos sobre la situación económica actual y las expectativas a futuro. Estos resultados reflejan una cautela generalizada entre los empresarios, lo que podría influir en las decisiones de inversión y contratación en los próximos meses.
Analistas señalan que la disminución sostenida en la confianza empresarial responde a factores como la incertidumbre económica global, políticas nacionales que afectan ciertos sectores y expectativas moderadas sobre el desempeño económico de México. Este panorama plantea desafíos para la recuperación y estabilidad del sector empresarial en el corto plazo.
Con un cierre de año marcado por la incertidumbre, el Inegi continuará monitoreando estos indicadores para evaluar la percepción empresarial y su impacto en la economía mexicana.