Tras el periodo de sequía que hubo, actualmente la presa Infiernillo se encuentra al 66 por ciento de su capacidad; El Caracol al 75 por ciento; La Calera al 132 por ciento, sin riesgo de desbordamiento por el desfogue que se realiza; Palos Altos al 96 por ciento; Tepecoacuilco al 74 por ciento; Las Garzas al 8 por ciento, Laguna de Tuxpan al 76 por ciento; El Gallo al 104 por ciento, sin riesgo de desbordamiento con desfogue y Revolución Mexicana al 82 por ciento.
Las fuertes lluvias que se registraron durante el mes de julio, permitió el incremento del nivel del agua en las nueve presas que hay en la entidad,
La Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural destacó que la lluvia juega un papel crucial en la recarga de los cuerpos de agua dulce, como ríos, lagos y acuíferos subterráneos, lo que ayuda a mantener la calidad del agua, asegurando un suministro adecuado para el consumo humano y el riego eficiente de los cultivos.