Diputados locales abordaron con diferentes posturas el caso de la niña de 10 años de una comunidad indígena a la que, a pesar de presentar la denuncia penal por violación, personal del Hospital Raymundo Abarca Alarcón, se negó a practicarle un aborto.
Las morenistas se refirieron a la injusticia cometida contra la niña y el riesgo de su salud, mientras que una diputada priista pidió que, no se politice el tema.
En la sesión de la Comisión Permanente del Congreso Local, en su intervención con motivo de la conmemoración del Día de la Mujer Mexicana, la diputada de Morena, Citlali Calixto Jiménez, se refirió al caso de la niña violada y embarazada a la que se le negó la interrupción del embarazo.
Llamó a los diputados y diputadas a generar marcos jurídicos con los que se atienda la deuda histórica que tiene el Estado con las mujeres, niñas y adolescentes, y que casos como este no se repitan.
La morenista pidió que, los buenos deseos no se queden solo en el discurso. En seguida, la priista, Julieta Fernández Márquez pidió la palabra para pedir que ese caso no se politice porque, dijo, esa no es la solución, y argumentó que si los médicos se negaron a practicar el aborto, fue por un asunto de salud.
La diputada de Morena, Leticia Castro Ortiz se refirió a que el cuerpo de una niña no está preparado para un embarazo y el continuarlo puede poner en riesgo a su vida.