La explotación infantil es una actividad que se ve poco en el municipio de Zihuatanejo, pero se detona durante los períodos vacacionales con la población flotante de personas que llega al destino procedente principalmente de la montaña de Guerrero que traen consigo a sus hijos para desarrollar la venta ambulante de productos varios.
En vacaciones de verano, Semana Santa y Decembrina es común ver a niños pequeños de entre 4 a 13 años vendiendo artesanías en playas como parte de la actividad económica que desarrolla su familia para llevar el sustento a la casa.
Según datos que da a conocer el DIF de Zihuatanejo, a través de su presidenta, Lizette Tapia Castro, en estos periodos de asueto se han contabilizado hasta 70 niños haciendo esta actividad, derivado de ello, se han implementado módulos de atención del Sistema Integral para la Familia en playas.
Tapia Castro explicó que en el municipio sí se han dado casos de retención de menores de manera temporal, como parte del protocolo que se sigue, que consiste en que después de la denuncia o la identificación de algún niño violentado en sus derechos, se hace una visita por parte de la procuradora del DIF, se entrevista al menor, se recolectan datos, se hace la visita domiciliaria a la familia para hacer un apercibimiento del agravio a los derechos de los niños.
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Precisó que en el municipio, no se ha detectado ningún caso de menores con daños emocionales severos por verse involucrados al trabajo forzoso, ya que aquí en Zihuatanejo el niño es sometido a trabajos de venta y no a empleos pesados donde le pidan la aplicación de fuerza y lo ponga en peligro latente.