El Secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales del estado de Guerrero, Arturo Álvarez Angli, dio a conocer que los cubrebocas usados no deben arrojarse a la basura convencional, por tanto, los gobiernos municipales no tienen que tratar con estos residuos considerados como peligrosos.
Vía telefónica el funcionario estatal comentó que son desechos biológicos que deben tener un tratamiento especial, y de este se deben encargar los centros médicos o empresas particulares que se dedican a dar disposición final adecuada a los Residuos Peligrosos Biológico Infecciosos (RPBI).
Aunque no dio a conocer cifras exactas, Álvarez Angli dijo que tienen reportes que en los basureros municipales llega una importante cantidad de cubrebocas usados.
Lamentó esta situación porque consideró que de esta manera incrementan las posibilidades de que se incrementen los casos de COVID-19, por lo tanto exhortó a los ayuntamientos a que promuevan la separación de estos residuos.
El titular de Semaren hizo un llamado a todos los habitantes a que tomen conciencia, que concentren en una bolsa los cubrebocas que usan en cierto periodo de tiempo y que los lleve a cualquier centro hospitalario para que reciban una disposición final adecuada.
Aseguró que ya sea en infraestructura de la Secretaría de Salud o del Instituto Mexicano del Seguro Social, cualquier sistema de salud pública está obligado a recibir estos desechos.