La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, prohíbe el trabajo por debajo de los 15 años, así como en labores insalubres o peligrosas, trabajos nocturnos y tiempo extraordinario, pero en Guerrero pareciera que no se hace valer la ley, pues la entidad está considerada dentro de los primeros tres estados en todo el país con explotación laboral infantil, junto con Chiapas y Oaxaca.
A diario, principalmente en las calles de ciudades grandes como Acapulco y Chilpancingo, se observa a menores, niñas y niños realizando actividades laborales diversas; desde limpieza de parabrisas, cargadores de mercancía, y venta de dulces o artesanías; en su mayoría son de familias de bajos recursos y de orígen indígena.
Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografia (INEGI), revelan que en todo México existen alrededor de 3.2 millones de niñas, niños y adolescentes ejerciendo alguna actividad laboral, en Guerrero se estima que más del 16 por ciento representa el trabajo infantil, lo equivalente a más de 100 mil menores de loscuales, 20 mil son de alto riesgo.
"El derecho humano a la educación y al disfrute de su niñez" se ve cuarteado ante la necesidad de unos cuantos pesos, ya sea por estar en orfandad, por explotación de sus tutores o para ayudar a sus padres a mantener familias numerosas; este panorama no es privativo de la zona turística y urbana, también se da en los pueblos; tal es el caso de la región Tierra Caliente en donde datos revelan que en campos meloneros, existen entre 30 y 50 menores en labores haciéndolo de forma muy precaria.
Si bien es cierto, con el paso de los años las cifras han ido disminuyendo, pero no lo suficiente, llevan un proceso lento, por lo que es necesario que las autoridades redoblen esfuerzos para subsanarlo y no esperar a que sean víctimas de una desgracia, porque los niños deben jugar como niños y no jugar a ser adultos.