El Gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores, aseguró que no va a permitir que la fuerza y presencia del estado queden sometidos por algún grupo delincuencial y refrendó que no estará ausente a los problemas que se generaron en Petatlán, el pasado viernes, ni a los que surjan en la entidad.
En conferencia con medios de comunicación Astudillo Flores expresó que su gobierno no quiere que se generen rispideces ni confrontaciones, pero afirmó que eso no significa que "el estado esté sometido a caprichos ni actitudes que están trazadas dentro de personas que están fuera de la ley".
El gobernador dijo que tienen información que existe la amenaza de que surjan nuevamente las protestas, en ese sentido, dijo que están en la mejor disposición de dialogar con los manifestantes, a su vez, se encuentran preparados para cualquier circunstancia.
Sobre las declaraciones del Secretario de Seguridad Pública Estatal, David Portillo Menchaca, quien refirió que lo ocurrido sobre la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo fue un acto similar al de Sinaloa, el mandatario respondió que no es algo agradable ni que de buena imagen a Guerrero.
Agregó que la inseguridad es un problema nacional y que respecto al tema, el estado no fue sometido y ya tienen perfectamente ubicadas las acciones, de dónde vienen y consecuentemente se actuará.
El mandatario precisó que el transporte público regresó a la normalidad y llamó a las escuelas y población en general a regresar a llevar a cabo sus actividades cotidianas.
Durante su visita al puerto en donde se reunió con transportistas y los alcaldes de Zihuatanejo y Petatlán, Jorge Sánchez y Esteban Cárdenas, respectivamente; el ejecutivo estuvo acompañado por mandos de seguridad nacional y estatal para tratar temas de seguridad en la región.