La directora del jardín de niños "Miguel Bernal Jiménez", que se ubica en la colonia Barrio Nuevo del municipio de Petatlán, Claudia María Ríos Arellano, informó que desde hace cuatro años, la empresa constructora que contrató el Instituto Nacional de la Infraestructura Física Educativa (Inifed) entregó incompletas las que serán las nuevas instalaciones del preescolar, razón por la que desde el 2014 no han podido mudarse de inmueble.
Ríos Arellano relató que desde el 2013 con la presencia de los fenómenos tropicales Manuel e Ingrid, el jardín de niños, que se ubica a metros del cauce del río de Petatlán, se vio sumamente afectado con inundaciones, razón por la que resultó beneficiado con el Fondo de Desastres Naturales (Fonden) para que el plantel se moviera de lugar, supuestamente a un espacio más seguro para los alumnos.
Detalló que se hicieron las gestiones pertinentes con el ex alcalde en turno, Jorge Ramírez para comprar un terreno que fuera donado a la Secretaría de Educación Pública (SEP) y ahí se edificaran las nuevas instalaciones del preescolar Miguel Bernal, predio que quedó a unos metros del cuartel militar, en una zona alta.
En el año 2014 fue entregada la obra, que recibió la directora del preescolar en turno, sin embargo las instalaciones no tenían las ocho aulas que les habían prometido, tampoco la dirección, ni el comedor-cocina que requieren, pues cabe mencionar que los contratistas, les aseguraron que con el recurso otorgado por el Fonden iban a poder cubrir todas las necesidades del plantel, pero no fue así, puesto que ni siquiera acondicionaron los salones con butacas y pizarrones.
Actualmente, las nuevas instalaciones llevan más de cuatro sin utilizarse por dos razones; una porque el paso del tiempo ha provocado su deterioro, tanto de la estructura como en los cimientos, pues el suelo ha reblandecido y ha ocasionado que una parte de la escuela comience a sumirse; la segunda, se debe a que no está equipada en su totalidad y porque no han recibido un dictamen de Protección Civil o un especialista que determine que el lugar cuenta con las condiciones de seguridad adecuadas.
"La construcción que se hizo en el nuevo terreno, es en un lugar donde no es plano, hubo una parte que tuvieron que rellenar para hacer un muro de contención y que estuviera parejo, pero ya con el tiempo se sumió y las aulas no están en condiciones de ser ocupadas".
Por su parte, la supervisora de la zona escolar 59 de preescolar, María Soledad Román Campos, expresó que no pueden exponer la vida de los 134 alumnos del jardín de niños, por ello recalcó que han tocado puertas con diferentes autoridades para que se agilicen los trámites y se decida que es lo más conveniente para los alumnos, si permanecer en el antiguo domicilio o mudarse a las nuevas instalaciones.
"Estamos valorando, si aquí tenemos salones bien equipados con mobiliario y presentan condiciones y estamos trabajando de manera normal y si nos vamos para allá y si ponemos en riesgo a los niños, nosotros como autoridad educativa no estamos dispuestas a exponer a nuestra comunidad escolar a un desastre".
En ese sentido, existe una propuesta, en caso de permanecer en el antiguo domicilio, construir una barda perimetral para evitar que el agua del río entre al plantel en caso de ciclones y de moverse a las nuevas instalaciones, será terminar la obra y garantizar la seguridad de los alumnos, pero recalcaron que lo único que quieren es seguir ofreciendo los servicios educativos en las condiciones aptas.
"Nosotros queremos que nos den solución a este problema, ya sea aquí o allá, no estamos en una negativa de que nos queremos ir, nosotros queremos es que nos aseguren y que nos digan que ya presentan las condiciones y que la entreguen bien equipadas como quedaron de hacerlo".