El clima de violencia en comunidades de la sierra en la región Costa Grande ha ocasionado el desplazamiento de cientos de familias pero no la deserción escolar de alumnos, afirmó el Delegado de los Servicios Educativos del Gobierno del Estado, Fernando Leyva Sotelo.
En entrevista vía telefónica explicó que si bien las personas se ven en la necesidad de abandonar sus hogares porque no hay garantías de seguridad, al llegar a la cabecera municipal los estudiantes son recibidos en planteles por lo que no pierden sus estudios.
Dio a conocer que en los planteles de dónde se dan de baja los alumnos desplazados sí registran una deserción pero como en el cambio de domicilio ellos retoman sus estudios, la matrícula incrementa en otro plantel, es decir, está considerada como movilidad y no deserción escolar.
Datos de la Secretaría de Educación Guerrero revelan que en el caso específico de la comunidad serrana Vallecitos de Zaragoza, 10 de 30 maestros solicitaron su cambio a la SEG por cuestiones de inseguridad.
Del ciclo escolar que dura 200 días, en aquella zona los estudiantes perdieron un 20 por ciento de las clases, lo equivalente a 5 días de labores escolares aproximadamente.
Debido que no existían condiciones de seguridad las autoridades educativas adelantaron el periodo de fin de cursos, por lo que 12 alumnos de preescolar y 16 de dos escuelas primaria, concluyeron sus estudios antes del periodo oficial.
El Delegado aseguró que ningún alumno o maestro resultó herido, si bien en este momento no existen condiciones para que las cientos de familias desplazadas regresen a sus lugares de origen, existe la esperanza de que puedan hacerlo el próximo ciclo escolar.