El reforzamiento de seguridad que ofreció hace unos días la gobernadora Evelyn Salgado Pineda en sucursales bancarias del estado, para cuidar salarios y aguinaldos de los guerrerenses es prácticamente invisible, al menos así pasa en Zihuatanejo.
Desde que inició el mes de diciembre los bancos se han visto abarrotados por cuentahabientes, sin embargo, no se observa presencia permanente de la Policía Estatal o de fuerzas federales como la Marina, la Guardia Nacional o el Ejército Mexicano.
El pasado martes durante la mesa de seguridad, la mandataria informó que giró instrucciones para definir los operativos de resguardo en las sucursales bancarias, pero al día de hoy los uniformados no se ven estacionados por ningún lado.
Solo se ha visto a la policía preventiva y turística del municipio dar algunos rondines en el primer cuadro de la ciudad.
Es preocupante porque, aunque habitualmente las personas reciben sus prestaciones el 15 de diciembre, en estos días también ocurre, sin dejar de lado que hay quienes cobran el pago de sus quincenas o realizan depósitos y retiros importantes.
Cabe mencionar que en Acapulco, en los últimos días se han reportado al menos cinco asaltos de grandes sumas de dinero en efectivo, luego de haber sido retirado de las sucursales bancarias, ante la incompetente vigilancia policial.