Las denuncias por abusos de autoridad en el Centro de Reinserción Social del municipio de la Unión siguen surgiendo, este medio de comunicación de nueva cuenta fue contactado por internos de este Cereso para relatar las vejaciones que sufren por parte del jefe de seguridad de nombre Juan de Dios Barrera Morales.
Un reo que pidió la omisión de su nombre dijo que el 25 de mayo, Barrera Morales, les decomisó a dos compañeros el dinero que sus familiares les habían mandado para comprar víveres.
Otro interno de nombre Pedro, que trabaja en la carpintería denunció que no lo dejaban trabajar porque debía 20 pesos a otro compañero y para dejarlo laborar el jefe de seguridad le pedía 40 pesos para pagar su deuda y dejarlo desempeñar el trabajo de donde dijo saca para alimentarse.
En cuanto a la comida, el detenido explicó que aunque el Cereso presenta un plan de alimentación a la Comisión de Derechos Humanos, este no es seguido por los administradores quienes les dan huevo, papas, calabazas, sopa, lenteja, lo que es una simulación de un buen trato que no existe.
Una versión que fue respaldada por una empresa proveedora de tortillas, quien declaró que la administración le pedía "tortillas delgadas para darle una cantidad a los reos y les alcanzara, lo que significa en muy poca ración para las personas"
La acusación también es contra los elementos de seguridad que revisan a las visitas, relataron que cuando los visitan sus familiares son desnudados; ya sean adultos o pequeños y sin ropa los ponen a hacer sentadillas.
En el Centro de Reinserción hay un cinturón de seguridad el cual no debe ser violado por los reos, o se considera un intento de fuga, pero los procesados denunciaron que son obligados a limpiar ese espacio de área verde porque no hay quien lo haga.
Relataron que cuando el Director se enoja, los deja incomunicados por 4 días porque los teléfonos tipo celulares con recarga son de su propiedad y cuando quiere les pone saldo para llamadas y cuando se enoja no les presta los teléfonos.
Continuaron con decir que no es la primera vez que hacen estás denuncias públicas, hay quejas ante Derechos Humanos tanto en la región como a la Ciudad de México con la petición de solución pero no hay respuesta.