Padres de familia del colegio particular Rotterdam denunciaron que el director del plantel, Mateo Vázquez Aguirre se ha negado a negociar con ellos para darles una alternativa con el pago de las colegiaturas; los tutores manifiestan que no se están negando a cubrir las cuotas, únicamente piden facilidades ya que por la pandemia no tienen las mismas posibilidades económicas que antes.
Ayer martes, unos cien padres de familia de nivel preescolar, primaria, secundaria y preparatoria, acudieron a una reunión con el director del plantel, Mateo Vázquez Aguirre, para hacerle entrega de un documento en el que le explican que debido a la situación económica que se vive en el municipio debido a la pandemia del coronavirus se enfrentan a dificultades económicas.
En el documento, los papás entre otras cosas, solicitan el 50 por ciento de descuento en los pagos de las colegiaturas correspondientes a los meses de abril y mayo, "y lo que dure la contingencia", así como "eliminar el cargo de tarjeta de crédito que será un instrumento para muchas familias, ya que los bancos están apoyando la liquidez a través de suspensión de obligaciones de pago, aunado a que la Profeco se ha pronunciado numerosas veces en contra de dichos cargos".
Señalaron en el documento que "no sólo hay que enfrentar la cuarentena en este trimestre, el an?o lo caminaremos con dificultades y retos que aún estamos por descubrir, aunque por ahora identificamos las siguientes consideraciones, la escuela no hace uso de sus instalaciones y las familias tendremos que
absorber los gastos de luz, internet y estadía de los alumnos, lo que incrementa los gastos en la economía familiar".
"La posición del maestro ha sido modificada segu?n el nivel de los niños, hay un requerimiento de apoyo y supervisión en casa, siendo los ma?s pequen?os los que mayor tiempo requieren y esto hace la responsabilidad de la clase compartida, en una forma que antes no existía y por lo mismo debe ser considerada diferente en cada caso; el interés de largo plazo tanto de los padres como de la escuela es continuar con la educación de los alumnos en su plantel".
Asimismo, expusieron que las actividades correspondientes a días festivos considerados en el calendario escolar no se llevaron a cabo "representan un costo que ustedes absorben según el contrato celebrado, esto repercutiendo en un ahorro considerable para la escuela, y que seguramente muchos padres estaríamos en la mejor disposición de reconsiderar en caso de que la SEP reaunude las clases muchos más eventos que significan algún impacto económico".
Al término de la reunión, una de las madres de familia que se identificó como la señora Avendaño, comentó que todos los papás salieron de la reunión "inconformes, indignados y decepcionados porque el director llegó acompañado de un abogado y de un contador; en todo momento fue como estar hablando con la pared y la postura fue "a nosotros no nos importa su situación económica, a nosotros nos deben las mensualidades y nos tienen que pagar, no hay ninguna consideración para nadie".
La ama de casa comentó que luego de este ríspido encuentro, muchos padres están considerando cambiar a sus hijos a otros colegios en el próximo ciclo escolar, "por incongruentes e insensibles, pues hasta antes de esta situación, se la pasaban diciéndonos a los padres que todos éramos una familia, que había que impulsar los valores de solidaridad, cooperación, lealtad y otras tantas cosas que ahorita que estamos necesitando de esa solidaridad, nos están dando una patada en el trasero, por lo que ahora vamos a solicitar la intervención de la Secretaría de Educación Pública para que al término de este ciclo escolar, nos entreguen los documentos de nuestros hijos".