45 menores del jardín de niños indígena Tepochkajli, ubicado en uno de los cerros de Zihuatanejo en la colonia Convergencia, toman clases en salones que con sacrificio padres de familia edificaron para cubrir con la necesidad de estudio para los menores de cuatro asentamientos humanos, entre ellos, Vista Hermosa, Cima de Jesús y Linda Vista.
Es por ello que la directora encargada del plantel, Alma Delia Rivera Cabrera, lanzó un llamado a la Secretaría de Educación del gobierno del estado de Guerrero para que esta institución sea tomada en cuenta en el presupuesto del 2020.
La institución tiene tres aulas todas techadas con lámina galvanizada, una de las cuales no es utilizada por el peligro que representa para los menores por no contar con un barda perimetral, por eso es que los alumno de primer y segundo grado toman clases juntos, mientras que en la tercera se albergan los pupilos de tercer grado.
Otra necesidad apremiante de la institución, son los baños que están sobre una loma pequeña, con escaleras precarias y mal hechas, cuenta con dos módulos pero uno es utilizado como bodega y el otro solo tiene una taza sin tanque, condiciones no adecuadas para los niños.
El predio del jardín de niños indígena, tiene una tamaño de 2 mil 250 metros, los cuales no son aprovechados correctamente, ya que una parte del predio tiene una zanja de aproximadamente 4 metros de altura, que necesita un muro de contención para ser rellenado.
Rivera Cabrera explicó que la institución fue fundada hace 18 años cuando tenía el nombre de Tercer Milenio como un anexo de la escuela Margarita Maza ubicada en la colonia Primer Paso Cardenista y se ha trabajado de manera precaria con apoyo de la sociedad civil y la misma población quienes construyeron las tres aulas.