Integrantes de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA) protestaron y arrojaron maíz en la entrada de las oficinas de la delegación del Bienestar en la ciudad de Chilpancingo; exigen la compra de 900 mil toneladas del insumo para 200 productores guerrerenses.
Después de las 13:00 horas, más de 50 productores, a bordo de tractores y camionetas, arribaron a las oficinas, para exigir al delegado federal, Iván Hernández, que pase el mensaje al presidente, Andrés Manuel López Obrador.
Indicaron que desde noviembre la delegación federal y Segalmex, tenían que comprar su maíz, sin embargo, las autoridades no lo han hecho, lo que evidentemente está afectando las condiciones de la semilla y el ingreso económico de los agrícolas guerrerenses.