Además de miles de personas contagiadas y muertas, el Covid-19 en Guerrero ha dejado un incremento considerable en el número de niñas y niños que se ven en la necesidad de trabajar, al finalizar este año se estima un crecimiento histórico.
Y es que ya sea porque quedaron huérfanos o porque deben ayudar al sustento en casa, cada vez son mas los menores de edad que desde muy pequeños se incorporan al campo laboral.
Las cifras de menores en esta condición del 2021 se van a poder ver el próximo año, pero como antecedente sabemos que según el INEGI en 2019 en México se tenían contabilizados más de 2 millones de niños de los 5 a 17 años de edad en condiciones laborales, previo a la emergencia sanitaria.
De ese total la gran mayoría trabajan en ocupaciones no permitidas, es decir, participan en labores peligrosas o prohibidos por debajo de la edad mínima.
Aunque los número no mienten y la afluencia de niñas y niños en la calles es evidente, autoridades se dicen entusiastas, argumentando que ha reducido el trabajo infantil.
El Secretario del Trabajo y Previsión Social, Oscar Rangel Miravete, dijo que la entidad tuvo una reducción del 50 por ciento; en 2015 registraban 121 mil niños y niñas trabajando y en 2020 la cifra redujo a 63 mil.
Lo cierto es que el impacto de la crisis sanitaria sobre los menores inmersos al mundo del trabajo todavía no se cuantifica, pero sin duda será enorme.