El presidente de la Asociación de Restauranteros de playa Las Gatas, Roberto Bustos Olea consideró urgente que las autoridades municipales en coordinación con algunos prestadores de servicios, reeplanteen el reglamento de playas, pues aseguró que los turistas ya no respetan las normas del gobierno local, pues hacen lo que les plazca sin importar si está prohibido o no.
"Necesitamos urgentemente un reglamento de playas, ya la gente no respeta a las autoridades; está ecología, pero igual entran con vidrio, plástico, traen de tomar de los Oxxos, es un relajo".
Explicó que sigue habiendo un gran descontrol en el tema de qué se puede ingresar y que no a la playa, pues aún hay personas que llevan vidrio y unicel, sin dejar de lado que en ocasiones se instalan en áreas privadas o riesgosas con tal de no llegar a un restaurante a consumir, lo cual representa pérdidas económicas para ese sector.
Consideró pertinente añadir al reglamento de playa algún apartado que señale como prohibido ingresar a los restaurantes con alimentos y bebidas, o buscar la manera de disminuir la cantidad de cosas que llevan consigo con el propósito de hacer que la economía local aumente.
"Hay muchas ideas, pero desgraciadamente pero si no se tiene el apoyo por parte de la autoridad es poco lo que se puede hacer; hay mucho empresario que se da cuenta de lo que está pasando, pero hay otros más que prefieren ese tipo de desorden, trabajar con ese tipo de turismo a pesar de que no les deja ganancia alguna".
En ese sentido, dijo que turismo ha habido, lo que no hay es dinero, comentó que no sirve de nada que los restaurantes estén llenísimos, si no va a representar una buena venta, ya que el poco dinero que llegan a captar a duras penas les alcanza para solventar los gastos del negocios.
"Yo veo restaurantes en las Gatas llenísimos pero sus instalaciones siguen siendo las mismas no hay modernidad y ahí es donde te das cuenta que de qué sirve tener un restaurante lleno si no va a haber ganancias".