La creciente preocupación por los enmallamientos de especies marinas, en especial de ballenas jorobadas, ha alcanzado niveles alarmantes en las costas de Baja California Sur. Autoridades federales, estatales y expertos han catalogado esta situación como un problema en aumento que requiere atención urgente.
Según datos proporcionados por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), en lo que va del año se han registrado 5 ballenas jorobadas, 3 lobos marinos y 1 tortuga enmalladas en las costas del estado.
Estas cifras preocupantes reflejan una tendencia preocupante que afecta a la biodiversidad marina de la región. Durante la temporada de avistamiento 2023-2024, se llevaron a cabo 14 operativos de desenmalle a diversas especies marinas en Baja California Sur.
Históricamente, de 1996 al 2021, México ha registrado 218 cetáceos enredados, de los cuales solo 99 fueron liberados, según datos de la Red de Atención a Ballenas Enmalladas (RABEN).
La titular de PROFEPA en Baja California Sur, Andrea Geiger, expresó su preocupación ante la situación, destacando casos recientes como el hallazgo de dos ballenas enmalladas en una sola semana. Geiger señaló: "Estamos viendo un aumento en el número de casos, especialmente en el último mes, que incluyen no solo ballenas, sino también lobos marinos y tortugas". La situación se atribuye principalmente a la presencia de redes fantasmas e ilegales en los fondos marinos, consideradas un enemigo invisible que amenaza la vida marina en las aguas cristalinas de la región.
Según el informe "Redes Fantasmas" de Greenpeace, se estima que cerca de 640 mil toneladas de residuos plásticos, incluidas redes de pesca abandonadas, representan el 10% de los residuos en el mar. Estas redes han causado la muerte de cientos de tortugas marinas y otras especies. Francisco Gómez, director ejecutivo del Museo de la Ballena y Ciencias del Mar, explicó: "Estas redes fantasmas son artefactos de pesca perdidos y abandonados por las pesquerías, que continúan atrapando especies marinas de forma indiscriminada".
Este fenómeno plantea una seria amenaza para la fauna marina no solo en Baja California Sur, sino en todo el mundo. Ante esta crisis ambiental en aumento, se hace evidente la necesidad de un esfuerzo conjunto por parte de pescadores, autoridades y la sociedad en general para combatir los enmallamientos y proteger la biodiversidad marina de la región. Solo con medidas coordinadas y acciones concretas podremos revertir esta preocupante tendencia y garantizar un futuro sostenible para nuestras especies marinas.