La transición de la Secretaría de Salud (SSA) al IMSS Bienestar en Baja California Sur continúa, según autoridades, con el propósito de mejorar la atención médica y garantizar servicios de salud a la población. No obstante, este proceso enfrenta múltiples dificultades.
En medio de esta transición, el personal de enfermería se encuentra a la deriva, lleno de interrogantes sobre cómo operará el nuevo plan de salud. La falta de directivos a quienes acudir para resolver sus problemas y necesidades ha sido una constante denuncia. Marlene Cota, enfermera y secretaria general de FINTRA (Fuerza Independiente de Trabajadores de la Salud), expresó su preocupación:
"Para poder aclarar estas dudas, pero siguen persistentes ya que no cuentan con la información o lineamientos que deberían de tener las autoridades en sus manos para saber cómo va a ser el proceso. Cómo vamos a trabajar. Eso nos preocupa bastante, estamos en el limbo, en el aire, sin información clara, concisa y concreta de parte de autoridades estatales".
Recientemente, el 26 de mayo, el mandatario estatal, Víctor Castro Cosío, junto con el presidente Andrés Manuel López Obrador, revisaron los avances del plan de salud, informando un progreso del 95% en la construcción del hospital ubicado en Santa Rosalía. Desde el anuncio del cambio en octubre de 2022, se ha invertido cerca de 150 millones de pesos para mejorar las instituciones médicas. En 2023, se basificaron 460 trabajadores y se transfirieron 940 profesionales de la SSA al IMSS Bienestar, según información del Gobierno del Estado.
Otro problema que se suma es la falta de pagos al personal suplente de enfermería. Los afectados han expuesto un adeudo de entre 1 y 4 quincenas, y hasta el momento, las autoridades se han deslindado de la situación. Una enfermera suplente del Hospital Juan María de Salvatierra compartió su testimonio bajo condición de anonimato:
"Compañeros míos y yo tenemos aproximadamente tres quincenas o más que no nos pagan. Lo que me comentaron las autoridades y los administrativos es que no pertenecemos ya ni a la Secretaría de Salud ni a Bienestar, o sea, que estamos trabajando por nuestra cuenta. Eso es lo único, no tenemos derechos laborales ni el gobierno nos está haciendo cargo de nuestro pago".
En un entorno de incertidumbre y preocupación, los trabajadores de la salud exigen respuestas claras para superar los desafíos de esta transición y asegurar que el IMSS Bienestar cumpla con su objetivo de mejorar la atención médica y garantizar servicios de salud a la población.