El entonces jefe político, Agustín Olachea Avilés, y el presidente de México, Miguel Alemán Valdés, inauguraron en 1948 la casa presidencial de El Caimancito, donde vivirían por más de 50 años los gobernantes del estado. En 1999, el gobernador Leonel Cota Montaña decidió no habitar la residencia y convertirla en un acuario, proyecto que terminó en 2005.
Al iniciar su mandato en 2011, Marcos Covarrubias anunció que la Casa de Gobierno sería rehabilitada con una inversión de 50 millones de pesos. El hoy gobernador del estado, Víctor Castro Cosío, estima que la inversión real fue de 300 millones de pesos, y criticó el lujo del inmueble.
Castro Cosío señaló que durante su gobierno El Caimancito podría convertirse en un centro cultural o un hotel que permita obtener recursos para los deportistas sudcalifornianos. Indicó que con ello se podrían generar ingresos de hasta 600,000 pesos mensuales.