A lo largo de la pandemia, los gimnasios han tenido que cerrar sus puertas en múltiples ocasiones debido a los cambios en el semáforo de alertas sanitarias. Aunque sus ingresos han disminuido, los gastos continúan incrementándose. Esto ha llevado que muchos se planteen el cierre definitivo: unos lo han hecho, mientras que otros siguen luchando.
Pese a este escenario poco favorecedor, Yazmín León, dueña de Barbie Spinning & Gym, ya planea cómo reforzar las medidas sanitarias una vez que le permitan abrir su negocio. Uno de los requisitos tras la reapertura será que sus clientas estén vacunadas contra el covid-19.