La escasez de vivienda accesible y los altos costos de renta representan un desafío importante para los estudiantes en la entidad. Axel García, estudiante de ingeniería en desarrollo de software web en la Universidad Autónoma de Baja California Sur (UABCS), expuso las dificultades que enfrenta al buscar un lugar para vivir en la capital.
García explicó que actualmente debe destinar alrededor de 4,000 pesos mensuales para alquilar un espacio de dimensiones mínimas, que consta de un cuarto con baño y cama. Aunque el alquiler incluye servicios básicos como luz, agua e internet, destacó que las condiciones del espacio son limitadas y no cumplen con las necesidades de un entorno adecuado para estudiar y vivir.
"En mi caso, soy foráneo y, al no tener familiares ni conocidos aquí, encontrar un lugar decente que ofrezca una buena relación calidad-precio es complicado", señaló García. Mencionó que su situación no es única, ya que muchos jóvenes deben adaptarse a opciones que, a pesar de su costo, no ofrecen comodidad ni calidad.
El mercado de vivienda para estudiantes en la capital ha sido una preocupación recurrente debido a la limitada oferta de espacios asequibles y a la creciente demanda de jóvenes que llegan para cursar estudios superiores. Las opciones disponibles, en su mayoría, no ofrecen una relación equitativa entre precio y calidad, lo que dificulta que los estudiantes logren una estabilidad habitacional.
García también expresó su interés en que el reciente programa de vivienda anunciado por la presidenta Claudia Sheinbaum contemple alternativas que beneficien a jóvenes y parejas, ofreciendo opciones que se adapten a sus necesidades y a su capacidad económica. "Esperamos que este programa pueda proporcionar viviendas más cómodas y adecuadas para situaciones como la nuestra", afirmó.