Baja california sur es una zona propensa a sufrir huracanes por lo cual especialistas se han puesto a trabajar para ver cómo pueden crear tecnología que aminore los efectos de dichos fenómenos.
En junio de 2004 el grupo tecnológico denominado Electrificación Local de la Atmósfera Terrestre (ELAT) propuso al gobierno del estado el proyecto experimental de la instalación de una antena de iones en el municipio de Los Cabos.
La cual tenía la finalidad de desviar los huracanes que se acercaran por la parte sur de la entidad. Dicho artefacto estuvo operando durante 2004, 2005 y 2006 obteniendo buenos resultados. Debilitando en 2004 el huracán Javier de categoría 4 a ciclón tropical, en 2005 debilitó el huracán Otis de categoría 2 a tormenta tropical y el huracán John de categoría 4 a 2.
Tras una fuerte sequía, inconformidad y desconfianza de la población y el sector agrícola ganadero fue retirada en 2008. Especialistas comentan que este tipo de experimentos son comunes, sin embargo muchos de ellos suelen realizarse de manera clandestina.
"Algunos están como en etapa experimental es decir son compañías privadas que están buscando encontrar alternativas para minimizar ciertos impactos de los fenómenos naturales y que seguramente están haciendo sus desarrollos tecnológicos y probablemente los están probando incluso con o sin permiso de las comunidades y de los gobiernos"
Con el paso de los años especialistas han notado que los fenómenos hidrometeorológicos son cada vez más frecuentes e intensos, dejando en su paso una gran destrucción, esto se debe a múltiples factores ambientales.
"Muchas investigaciones han demostrado que en la cuenca del atlántico debido al mismo cambio climático los ciclones tropicales han aumentado en su frecuencia y en su intensidad, durante los últimos años se ha podido medir eso, por su parte en el pacifico todavía en términos de la comunidad existe la discusión de que no se se han observado estos cambios, no se ha tenido una tendencia tan marcada como en el atlántico"
Meteorólogos comentan que hasta el momento no cuentan con instrumentos de monitoreo los cuales contemplen dentro de múltiples factores naturales de los fenómenos la intervención de tecnología, por lo que aún los especialistas siguen perfeccionando dicha tecnología.