"El desconocimiento de la lengua de señas mexicana, genera también cierta dificultad al momento de comunicarse con personas sordas, es importancia de fomentar".
La lengua de señas forma parte del patrimonio lingüístico desde el 2005.
En México, cerca de 2.3 millones de personas tienen discapacidad auditiva, el 50% son mayores de 60 años; el 34 % tiene entre 30 a 59 años y más del 2 % son niñas y niños.
En la actualidad, existen traductores e intérpretes que unen a la comunidad sorda con el mundo que les rodea, rompiendo barreras lingüísticas.
El trabajo de Dassy Osuna, va más allá de las palabras.
"Lengua de señas mexicana no mexicanas sí es un poco difícil porque tienes que coordinar varios elementos tu cuerpo gesticulación la memoria entonces es un poquito difícil como otro cualquier idioma pero si te gusta aprendiz rápido".
La Discapacidad Auditiva puede clasificarse como: Neurosensorial o de percepción, alteraciones que afecta el nervio auditivo, Conducción, dificultad para la transmisión del sonido o la combinación de las dos anteriores, según la OMS.
La Lengua de Señas Mexicana(LSM), es una serie de signos gestuales articulados con las manos, acompañado de expresiones faciales, mirada intencional y movimiento corporal.
acompaña a personas sordas en consultas médicas, a realizar trámites o facilitar su acceso a la educación.
Es una oportunidad para quienes confían en Dassy como su voz.
"Entonces yo iba con ellos para poderles ayudar para interpretar lo que ellos necesitaban y a veces ellos se frustraban mucho porque decían es que no me entienden ven y dile hasta los mismos familiares a veces me decían dile a mi mamá esto dile a mi mamá al otro".
Como traductora invita a la población a ser partícipes de la inclusión y la igualdad, la interpretación de Dassy habla por aquellos que no pueden hacerlo por sí mismos.