En la colonia Ampliación Villas de Guadalupe Don Cirilo nos relata cómo pasó la noche del huracán Hilary en su vivienda En lo alto de una colina vive Don Cirilo García León, un hombre mayor solitario, quien pasó unos días complicados por las intensas lluvias que el huracán Hilary dejó en la ciudad.
"Se me metió el agua como ustedes pueden ver aquí hay deslaves se metió el agua al cuarto y estuve durmiendo como los zopilotes verdad parado y viendo el agua que me corría por los pies y pues gracias a dios no pasó a mayores y aquí estoy gracias a dios viendo otro nuevo día pero qué bueno que se preocupan en venirnos a ver"
En un pequeño cuarto hecho de madera, Don Cirilo pasa sus días, aunque dentro de sus planes está construir una pequeña casa de material para ya no tener problemas como cada temporada de lluvias, su mayor sueño es tener un lugar seguro donde habitar. El acercamiento de fenómenos hidrometeorológicos llegó y con ello la angustia de Don Cirilo de meter el poco material que tiene para construir su vivienda, acudir a un albergue no lo considera una opción pues alguien puede robar sus pertenencias.
"Estoy recibiendo un apoyo de unas personas, entonces aquí hay material que se puede perder y por esa razón no me fui a un albergue, porque dije, si me voy un albergue y cuando venga ya no hay nada qué cuentas le voy a dar a quienes me están ayudando, van a pensar que yo los vendí y los llevé al kilo, entonces pues dije no mejor me estoy aquí respaldando no le hace que me moje, y pues me mojé anduve todo mojado verdad, porque el viento me chicoteo por todos lados, estuvo duro el viento y asustado yo"
A pesar de haber vivido una situación tan complicada con los recientes efectos de Hilary, Don Cirilo se encuentra agradecido de que las lluvias y los fuertes vientos no hayan destruido su hogar, expresó que reforzó sus paredes y su techo con alambre de púas en cuanto se enteró que se acercaba un huracán. No es la primera vez que pasa por esta situación, en 2014 perdió su hogar y todas sus pertenencias en el huracán Odile no solo por los fuertes vientos sino también por "los amantes de lo ajeno".
"Si porque me tumbó y me descobijó de a tiro, me quitó el raban, mis láminas, el cuarto lo tumbó de a tiro y andaban unas personas llevándose los tanques de gas, estos no tuvieron compasión de que no estábamos, más que en ese momento otra persona y yo nos vinimos del albergue temprano porque en el albergue también tumbó los tanques del agua del baño en la escuela osuna , también lo destruyó"
Se estima que en Baja California Sur, alrededor de 70 mil personas habitan en zonas de riesgo, y muchos de ellos cuentan con viviendas endebles, lo que los hace susceptibles a poner en peligro su vida en temporada de huracanes, debido a las inundaciones, desborde de arroyos y deslaves que se presentan en la ciudad. La historia de Don Cirilo solo es uno de los miles de casos que existen en Baja California Sur, no tener un lugar seguro donde habitar.