Él es Manuel Salvador Cabrera, lleva más de 13 años dedicándose a lavar carros, se ubica en calles 5 de febrero y Antonio Navarro, aunque no tiene un establecimiento fijo y trabaja en vía pública, agradece a la gente que lo conoce y que lo apoya en su trabajo.
Relató que desde las 4 de la mañana llega a su zona de trabajo limpia y se prepara para atender a sus clientes, en un día bueno gana poco más de $1000 pesos y un día malo alrededor de $500 pesos.
"Aproximadamente como tengo un ayudante lavamos unos 20 25 carros gracias a dios y a la gente que nos apoya aquí que le estamos echando ganas pues tiene que ser bien temprano llego a la casa y salgo desde las 4 de la mañana de 4 de la mañana a 6 de la mañana ya barro trapeo junto el agua y pues ya empiezan a llegar las patrullas".
Información del Servicio Nacional de Empleo (SNE) estima poco más de 12 mil personas en Baja California Sur que no cuentan con un empleo o bien tienen uno de manera informal.
Para cuidarse de las altas temperaturas y evitar tener un golpe de calor, opta por mantenerse hidratado, ya sea con agua natural, suero y colocarse pañuelos húmedos en su cabeza, para mantenerse fresco o en algunos oraciones colocarse camisas de manga larga.
"Nosotros traemos un termo ahí hacemos suero a la brus haz de cuenta que le echamos limón y sal y pues también hacemos suco ahí le echamos dos bolsas de hielo hay que mantenerse hidratados porque está cabrón el golpe de calor yo soy blanco no más que ando bien quemado mira que estoy blanco no sé si está cabrón el sol la verdad pega con tubo".
Comentó que diariamente recolecta cubetas con agua para optimizar el uso del vital líquido y así, reutilizar para lavar por lo menos 3 vehículos, en algunas ocasiones el agua se escasea.
"No pues con una cubeta lavamos dos o tres carros tratamos de economizar el agua porque está cabrón también no está fácil con el agua está difícil hay que corretear el agua no está fácil el agua de hecho hay escasez de agua le doy gracias a dios que me da la capacidad de que la gente me apoye me anda ya me dan acá a veces traigo yo en el carro poquita".
Finalmente, Salvador Cabrera sigue laborando, todos los días se coloca en el mismo sitio desde temprana hora esperando a sus clientes, gracias a su esfuerzo y voluntad ha salido adelante.