La comunidad Travesti, Transgenero y Transexual, por años ha sido vulnerada y violentada, los crimenes de odio dirigidos a este sector de la población son cada vez más frecuentes.
Por décadas han buscado la igualdad para ejercer un trabajo, una vida digna, incluso, los servicios indispensables en la salud
Kenya Cuevas es un ejemplo de lucha dentro de la comunidad trans, una activista que a los 9 años fue expulsada de su hogar víctima de la violencia, desde esa edad vive del trabajo sexual, a los 13 años fue diagnsticada con VIH.
En 2016 vivió una de las experiencias más traumáticas de su vida, el transfeminicidio de una de sus amigas de trabajo.
"Estuve en situación de calle en situaciones de vulnerabilidad y después de vivir tantos años en la calle , fui criminalizada por un consumo de drogas , que me llevaron a la cárcel 11 años de mi vida y bueno después de esos años me tocó presenciar el trans femicidio, el primero reconocido en el país de mi compañera paola buenrostro en la ciudad de méxico y a partir de ese momento empezar a buscar justicia y alzar la voz por las personas trans me llevó y me condujo a ser activista".
Según un estudio realizado por Statista, México es el segundo país en América Latina donde se cometen más transfeminicidios.
En el periodo del 2018 se registraron 473 crímenes de odio, 261 fueron contra mujeres trans.
Los estados donde se han registrado más transfeminicidios son: Veracruz, 41; Tamaulipas, 35; Puebla y Ciudad de México, con 19 casos.
La mayoría son tipificados como homicidios.
"Desgraciadamente, hay muchos estados que no reconocen por decir los trans feminicidios como tal y nos siguen colocando como homicidios y dentro de los homicidios, pues son esos enormes que entraremos en las casillas de ser hombre efectivamente, el no reconocimiento de la identidad general genera no reconocimiento de estos ataques de violencia y es por eso que no tenemos cifras exactas sin embargo los esfuerzos que han tenido las organizaciones civiles para crear estos observatorios es lo que nos da un panorama de saber y tener el conocimiento".
Debido a la limitantes de sus derechos tanto sociales como en el ámbito laboral, la comunidad trans ha optado en su mayoría por dedicarse al trabajo sexual.
Mismo que llega a ser riesgoso no solo por contraer algún tipo de enfermedad sino porque llegan a ser violentadas y asesinadas.
"Prácticamente las mujeres trans estamos en alerta somos las personas más visibles y las que hemos tenido pocos derechos humanos reconocidos sin embargo y menos oportunidades es por eso que la gran mayoría de las mujeres o han transitado o se han colocado en el trabajo sexuales de estilismo en el que otras veces y labores domésticas y de costura ya que por ello por las desigualdades del género y de la identidad de género es por eso que no nos hemos profesionalizado y no tenemos doctoras arquitectas".
Años de lucha y activismo no han sido suficientes, este sector de la comunidad LGBTIQ+ exige justicia, y sobre todo igualdad en sus derechos, a fin de erradicar cualquier tipo de violencia para lograr vivir una vida plena, sin temor a ser juzgadas, señaladas y lastimadas.