Las recientes muertes de ballenas registradas en Baja California Sur han ocurrido por causas naturales, según informó Francisco Javier Gómez, titular del Museo de la Ballena. Explicó que, entre diciembre y abril, estas especies migran a las costas mexicanas, y dentro de este periodo es normal que se presenten casos de mortalidad dentro de los parámetros esperados.
Hasta el momento, no se ha detectado evidencia de interacción humana en estos decesos, señaló Gómez, quien enfatizó que las autoridades y especialistas permanecen atentos a la situación.
"La muerte natural no se puede evitar, pero las muertes por propelas, golpes con embarcaciones o ahogamientos en redes de pesca sí son prevenibles", subrayó.
El experto también indicó que es común que las ballenas se acerquen a la orilla en busca de alimento, lo que puede generar preocupación entre la población. Ante esto, hizo un llamado a mantener la vigilancia para evitar incidentes relacionados con la actividad humana y proteger a estos mamíferos marinos.
"La conservación de las ballenas depende en gran medida de la responsabilidad de quienes navegan en estas aguas", concluyó.