La venta de productos orgánicos de la región era algo con poca demanda hace un par de años, viendo ese nicho de oportunidad y con la enseñanza familiar en el sector agrícola Dulce Romero decidió emprender su propio negocio con un nuevo concepto para el público.
Primeramente se inició con la venta de alimentos realizados con productos orgánicos a los amigos cercanos y poco a poco fue despegando el negocio.
Teniendo como ejemplo el éxito del negocio productores locales comenzaron acercarse para comercializar sus productos y crear una red de apoyo entre sí.