Durante los últimos años muchos negocios de la colonia Centro han cerrado sus puertas. Esto se debe, comentaron los comerciantes cuyos negocios sobreviven, a la apertura de plazas comerciales en el sur de la ciudad.
La relojería Big Ben se fundó hace veintidós años y su dueño asegura que no tiene planes de cerrar. Por el momento, él y otros comerciantes están a la espera de que se lleven a cabo las obras para renovar el Centro, mismas que les prometieron antes de la pandemia.