El pasado 19 de agosto comenzó a operar en la ciudad de La Paz el nuevo sistema de transporte "Tiburón Urbano". Sin embargo, su implementación ha generado una fuerte oposición entre los transportistas locales, quienes expresaron su inconformidad ante la invasión de rutas y la posible afectación económica que el nuevo sistema podría causar.
Representantes de la Unión de Propietarios del "Sitio California" y otros transportistas anunciaron que interpondrán un amparo contra el "Tiburón Urbano". Argumentan que el nuevo sistema invade la mayoría de las rutas ya establecidas, transgrede la Ley de Transporte, y en un futuro, generará pérdidas económicas significativas para el gremio. Además, señalaron que el proyecto está envuelto en presuntos actos de corrupción.
Pedro Enrique López, uno de los transportistas afectados, denunció públicamente: "Siempre hemos denunciado la corrupción y la vamos a seguir denunciando porque tenemos un gobierno muy corrupto en relación con que tenemos una Ley de Transporte que no se reforma ni se libera. Ellos no pueden ignorar a los transportistas de esa manera".
Los transportistas aseguran que, para la implementación del nuevo modelo de transporte, la autoridad no consideró los criterios establecidos en la Ley de Transporte, la cual regula la operación de servicios tanto públicos como privados. Según el artículo 19 de dicha ley, al otorgar concesiones y permisos, es obligatorio realizar una evaluación del impacto que el nuevo servicio podría tener en la comunidad y en el sistema de transporte existente.
Los transportistas también señalaron que los procedimientos para la implementación del "Tiburón Urbano" deben incluir la presentación de una propuesta formal, someterla a un proceso de revisión, realizar consultas públicas, estudios de impacto, y obtener los permisos correspondientes.
En este contexto, Pedro Enrique López añadió: "Ignoraron a los transportistas porque nunca se llevó a cabo una reunión del consejo para aprobar tales rutas, mucho menos las dos últimas que aprobaron. Anunciaron la entrada de 20 camiones, pero resulta que el Ayuntamiento no compró ninguna unidad".
Ante esta situación, los líderes del transporte en La Paz exigen ser escuchados por las autoridades locales, para garantizar un trabajo justo y equitativo para todos los miembros de los colectivos urbanos.