Trata de sobrevivir sin ingresos es adulto mayor y cerillito

Rosa María de 68 años, ella es una de los tantos adultos mayores que labora como cerillito en las tiendas comerciales.

A su avanzada edad se hace cargo de su madre de 95 años que padece glaucoma, además desde hace 7 años se encuentra postrada en una cama, pues no puede caminar a causa de una cirugía de hace muchos años.

Su único sustento es su sueldo diario y la pensión de adultos mayores que tiene su mamá, desde hace quince días no sale a trabajar, por su edad la mandaron a casa para evitar que esta pudiera contagiarse de coronavirus al estar en contacto con los clientes.

Para ellas es difícil este periodo de contingencia, el estar en su casa significa no estar generando dinero para comprar sus alimentos.

En el lugar donde trabaja se creó un redondeo y lo recaudado se les entregará a los cerillos, pero esto es muy poco tan sólo 300 pesos por dos semanas, siendo que esa cantidad se producía de manera diaria cuando se iba a trabajar.  Rosa María pide el apoyo de las autoridades durante estos momentos difíciles por su situación.