Los vendedores y vendedoras de comida en la vía pública de La Paz reciben capacitaciones continuas por parte de la COEPRIS, enfocadas en higiene básica, manejo adecuado de alimentos y conservación de materia prima. Este esfuerzo tiene como objetivo principal garantizar alimentos seguros para la población.
Durante la temporada de lluvias, estos comerciantes enfrentan el desafío constante de los derrames de aguas negras, un problema persistente en la capital. Ante la detección de estos incidentes, optan por suspender sus ventas hasta que la situación en la zona se resuelva, priorizando la salud y seguridad de sus clientes.
Martha Barrera, comerciante de alimentos en La Paz, mencionó que "nosotros tenemos bastantes años donde en la Secretaría de Salud nos capacitan precisamente para la preparación y venta de alimentos. Tratamos de seguir las indicaciones de la Secretaría, como lavarnos las manos repetidamente durante el día y utilizar gel desinfectante, que según nos dicen es mejor que el agua con jabón después de la pandemia".
Este enfoque en la capacitación continua y el cumplimiento estricto de las normativas sanitarias refleja el compromiso de los vendedores de comida en La Paz por ofrecer productos seguros y de calidad a sus clientes, incluso en condiciones climáticas adversas y situaciones sanitarias complejas.