El amor puede transformarse, pero no siempre se termina, ya que, a lo largo del tiempo, las relaciones y las personas cambian y lo que se siente en un inicio puede evolucionar debidos a que se convierte en un tipo de amor más profundo y maduro, como el amor de amistad o amor familiar, aunque otras veces, las circunstancias, las diferencias o el crecimiento personal pueden llevar a que ese amor desaparezca o se desvanezca.
En muchos casos, el amor no se termina en el sentido de que desaparece por completo, sino que cambia de forma, adquiriendo nuevas características, normalmente el amor puede terminar en ciertos contextos, pero es más común que se transforme, adoptando otras formas dependiendo las experiencias y decisiones de quienes lo viven.