Según información emitida por la Dirección de Protección Civil en el municipio, existen 58 casas habitación en riesgo de desplomarse, no sólo por las lluvias, sino por el deterioro que presentan, entre ellas fincas protegidas por el INAH.
La dependencia dirigida por Crescencio Sánchez, señaló que muchas de estas construcciones sólo representan deterioro en las fachadas y que no es muy probable que una torrencial lluvia pudiera derrumbarla.
Las viviendas están deshabitadas y se encuentran principalmente en colonias como Obregón, San Miguel, San Juan de Dios y en la zona Centro.