La depresión es un padecimiento frecuente en las personas adultas mayores, debido a factores biológicos, genéticos o psicológicos asociados con el tipo de personalidad, distorsiones cognitivas de origen social, fallecimiento de seres queridos, traumas de la infancia, enfermedades genéricas, cambios endocrinológicos o problemas económicos.
Este síndrome depresivo se expresa de manera atípica en los adultos mayores de 60 años con irritabilidad, enojo, impaciencia, dolores físicos existentes o sin explicación previa, aislamiento social y apatía, por ello es necesario abordar el tema de la salud mental con la misma importancia que la salud física ya que el cerebro sufre cambios respecto a la edad y se debe atender.