Representantes de aproximadamente 50 familias que vendieron o reubicaron sus terrenos para la construcción del Parque Industrial Pilba, se manifestaron este lunes para exigir que tanto la empresa como las autoridades cumplan con las promesas, sobre todo la escrituración de sus predios y del servicio de agua potable.
Desde el 2013 la empresa Banterra formó el fideicomiso para negociar las 470 hectáreas de que consta el parque, para poder convencer a ejidatarios y pequeños propietarios de formar el polígono.
Luego en 2015 se logró el cierre casi el total de las compra-ventas con certificados parcelarios que se tuvieron que regularizar para poner en dominio pleno y poderlas vender, el proyecto inició con 220 hectáreas y se al término se duplico.
A la gente que no quiso vender se les permuto en otras zonas con terrenos solares para hacer sus casas, pero hasta el día de hoy no han recibido sus escrituras, por ello la inconformidad que derivo en una mesa de diálogo este mismo lunes por la tarde para llegar a acuerdos.