Según los bancos financieros, los fraudes con tarjetas han aumentado un 30% en los últimos años, lo que representa un costo anual de 70 millones de dólares en México y otras partes del mundo. Una de las nuevas formas se da con las compras en línea.
Diego González Almanza, presidente del Clúster de Tecnologías de la Información de Guanajuato (CLUTIG), alertó sobre las nuevas formas de robar los datos de las tarjetas de crédito y débito y recomendó en primer lugar, no perderlas de vista.
"Hoy en día, la forma más común de operar son las compras en línea, yo siempre les digo que los precios mágicos maravillosos no existen porque son los que generalmente roban la información.
Esas tiendas que presuntamente promocionan, únicamente clonan la imagen oficial de una tienda oficial, montan una página en internet con un hombre similar y lo que termina sucediendo es que el usuario ve una mochila que está a mitad de precio a diferencia de cómo está físicamente en la tienda y deciden comprarla en línea porque piensan que se están ahorrando la mitad, sin embargo es un fraude", señaló.