En Sinaloa se instaló un primer laboratorio clandestino, desde el cual se enviaba esta droga hacia Tijuana para, finalmente, introducirla a EEUU, del cual supuestas acusaciones señalaron que Ovidio Guzmán López, alias ?El Ratón?, era el encargado de coordinar la llegada de fentanilo a la CDMX para que los distribuidores de heroína comenzaran a mezclarlo con su mercancía.
Cabe señalar que los cárteles de la droga utilizan las ciudades fronterizas como un campo de experimentación esto antes de enviar sus cargamentos al país vecino, en el que los operadores distribuyen algunas dosis entre consumidores de Tijuana y Mexicali para estudiar sus efectos.